Desde Tejón y Areces prestamos asesoramiento mercantil a empresas de todo tipo.
En la actualidad realizamos un asesoramiento a variadas entidades: tecnológicas, alimentación, construcción y sector servicios.
Somos expertos en administración concursal, ayudando a empresas en procedimientos concursales, ya sea como abogados de la empresa en concurso o liquidación, o reclamando deudas de clientes en procedimientos concursales de terceras empresas.
De igual forma, participamos en fusiones, fusiones por absorción, contratos mercantiles, venta de participaciones, venta de sociedades, planes de viabilidad, etc.
Prestamos servicios en empresas como secretarios de Consejos de Administración, convocando juntas, llevando el orden de las actas y ayudando al correcto funcionamiento de la vida cotidiana de una sociedad.
Asimismo, nos ocupamos de ayudar a personas físicas, en la llamada ley de segunda oportunidad, mediante la cual se puede minorar de forma importante las deudas contraídas por particulares, si median las circunstancias adecuadas.
Ofrecemos diferentes tarifas que van desde igualas mensuales, a bolsas de horas, o pago por servicio.
El derecho comercial es un conjunto de leyes que regulan la conducta de los particulares, los comerciantes y las empresas que se dedican al comercio y la venta. También conocido como derecho mercantil, es una amplia área del derecho que interviene en muchas otras áreas del derecho, como la regulación medioambiental, los bienes inmuebles y la ley de seguridad alimenticia.
Algunas de las principales ramas del derecho comercial son la protección del consumidor, el derecho mercantil y el derecho de la propiedad intelectual.
El derecho comercial y el derecho mercantil se asocian con algunas cuestiones jurídicas diferentes. El incumplimiento de los contratos constituye una parte importante de la mayoría de las cuestiones jurídicas del derecho mercantil. Las transacciones entre empresas y clientes a menudo implican un contrato, y a su vez pueden surgir cuestiones legales en relación con los términos de ese contrato. En particular, un incumplimiento de contrato puede provocar pérdidas significativas a cualquiera de las partes.
Además de las cuestiones contractuales, las cuestiones jurídicas del derecho mercantil común incluyen
Disputas e infracciones en materia de publicidad y comercialización
Problemas de competencia desleal
Comenzar un nuevo negocio
Transferir o rescindir una empresa
Las quejas de los consumidores
Protección de la propiedad intelectual y los secretos comerciales
El trabajo de un abogado mercantil comienza con la obtención de las indicaciones necesarias y la información y documentos de respaldo de los clientes. El caso se revisa a fondo y se seleccionan los hechos y datos importantes.
Luego los abogados investigan la jurisprudencia y los precedentes, preparan alegatos y argumentos y asisten a reuniones informativas periódicas con los clientes.
Ellos trabajan para llegar a un acuerdo cuando sea factible y presentan mociones y argumentos al tribunal si el caso procede a un juicio.
Entender las necesidades de un cliente es una de las principales cualidades de quienes se dedican al derecho mercantil. Otras capacidades y aptitudes que se precisan son: la negociación, la conciencia empresarial y la gestión del tiempo y de las personas.
Los abogados especializados en derecho mercantil deben mantenerse al día con el actual clima empresarial y comercial. Los cambios y las modificaciones de la legislación y los reglamentos en todas las jurisdicciones implicadas.
Las empresas deben cumplir tanto con sus propios documentos constitutivos como con la ley aplicable a todas las empresas. Los abogados de las empresas se aseguran de que las actividades de sus clientes estén de acuerdo con ellos.
También preparan los documentos jurídicos necesarios para las actividades y operaciones empresariales realizadas por los clientes (como una reestructuración o una adquisición) y actúan como gestores de proyectos en ellas, asegurándose de que los aspectos jurídicos se ejecuten sin problemas y en el plazo previsto.
Los abogados financieros se ocupan de proteger legalmente a sus clientes contra los riesgos que conlleva un acuerdo financiero: los prestamistas corren el riesgo de perder su dinero y los prestatarios se arriesgan a tener problemas debido a las obligaciones que habrán asumido a cambio de la financiación proporcionada por los prestamistas.
Redactan o examinan los documentos jurídicos necesarios y se aseguran de que se hayan adoptado todas las medidas jurídicas necesarias para la financiación, en particular que el prestatario haya cumplido las condiciones para la concesión de los fondos.
Los abogados de los banqueros también asesoran a sus clientes sobre las cuestiones jurídicas que se plantean en relación con los acuerdos de financiación ya existentes.
Los abogados de resolución de disputas asesoran a sus clientes sobre la ley relacionada con las disputas en las que están involucrados y sobre la estrategia de resolución de conflictos.
Si estas disputas avanzan hacia un procedimiento judicial, redactarán los documentos legales necesarios y orientarán a su cliente a través de un juicio u otra audiencia.
Algunos abogados especialistas en resolución de controversias pueden actuar como árbitros o mediadores.
Los abogados de resolución de conflictos también asesoran a sus compañeros de profesión sobre cómo ayudar a sus clientes a evitar o minimizar los efectos negativos de posibles conflictos futuros en relación con sus acuerdos.
La mayoría de los abogados de los grandes despachos trabajan en el ámbito de los negocios, las finanzas y la solución de disputas. También se encuentran otros departamentos más pequeños, por ejemplo, el de empleo, el de la UE, el de propiedad intelectual, el de bienes inmuebles y el de impuestos.
Una parte importante del trabajo de estos departamentos es asesorar a compañeros de profesión cuando aparecen cuestiones legales en su área en sus acuerdos o disputas.
También capacitan a los abogados de otros departamentos en su área de derecho y les informan sobre los acontecimientos importantes que se producen en su área de derecho.
Los abogados de estos departamentos también pueden tener sus propios clientes y sus propios acuerdos o disputas. Su trabajo en estos departamentos puede parecerse al de sus homólogos en asuntos corporativos, financieros o de litigio y resolución de disputas.
Por ejemplo, los abogados de los departamentos inmobiliarios que trabajan en la venta de un edificio comercial trabajarán de manera similar a los abogados de empresas que trabajan en la venta de una compañía. Los abogados laborales que actúen para clientes involucrados en disputas pasarán por procesos legales similares a los de los litigios.
